Plan de Internacionalización

Home » SERVICIOS » Plan de Internacionalización

La internacionalización de las empresas es un proceso que debe ser abordado con cautela, estableciendo desde un principio las etapas por las que se ha de desarrollar.  Consideramos que es un proceso necesario y casi obligatorio, no como salida a la crisis económica que venimos soportando los últimos años, sino como una nueva mentalidad que se debe inculcar y desarrollar en todas las empresas.

Con la internacionalización de la empresa, el empresario puede encontrar mercados en los que su producto sea más competitivo y tenga una mayor demanda, también puede dar salida a excedentes de producción o tiene capacidad añadida para realizar una producción mayor, y por otro lado tiene opción de dar salida a productos que se hayan quedado desfasados pero que resultan atractivos en mercados menos desarrollados.

En el Plan de Internacionalización de la empresa, pretendemos que no sólo se limite la empresa a una mera actividad de importación-exportación, sino que encuentre nuevas opciones como pueda ser el traspaso total o parcial de la producción a diferentes países, buscando una mejora en los costes de producción, países que potencien la inversión extranjera o mercados en los que se puedan obtener mejoras cuantitativas o cualitativas de sus productos.

De este modo, establecemos una serie de pasos o etapas que se deben ir cumpliendo en todo Plan de Internacionalización:

Análisis previo de la empresa

Es primordial para afrontar de forma realista la situación en la que se encuentra la empresa e identificar los posibles riesgos que debe asumir.

Se debe incidir en los principales departamentos que se verán afectados por el proceso de internacionalización, como son , Producción, Comercial y Ventas, Financiero, y Administración. Con ello se pretende valorar el punto de partida de la empresa, destacando tanto fortalezas como debilidades de la compañía, y viendo la potencialidad de crecimiento de la empresa para adaptarse a las vicisitudes del mercado internacional.

Por otro lado, habría que llevar a cabo un análisis del entorno en función del mercado, sector y producto, que nos ayude a predefinir los diferentes escenarios en los que nos podemos encontrar para acometer las estrategias más apropiadas.

Selección de mercados

El siguiente paso es elegir de entre los mercados potenciales cuál o cuáles son los más atractivos para elaborar el plan de acción de la empresa. Aquí habría que partir de una primera premisa que es dictaminar si es más interesante para la empresa una diversificación de mercados o la concentración en pocos mercados. Teniendo siempre en cuenta el riesgo, los costes, así como el tiempo y esfuerzo que conlleva penetrar en cada mercado.

Formas de entrada

En este punto la empresa debe dictaminar la forma en la que prefiere acometer la entrada al mercado. Pueden ser basicamente de tres maneras: mediante acceso directo, con comerciales, agentes, comisionistas, o estableciendo sucursales o filiales; acceso indirecto, mediante con contratos con distribuidores, compañías de trading, franquicias, o también con centrales de compra; y por último con acceso en grupo, realizando acuerdos para uniones de empresas o consorcio para la exportación.

Política de productos

Dentro del catálogo de productos de la empresa, deberemos seleccionar los más apropiados para afrontar la salida al mercado internacional, ya sea por capacidad de producción, posibilidad de demanda, margen o rentabilidad alta, adaptabilidad del producto a las diferentes condiciones y estándares de calidad exigidos, etc.

Política de comunicación

Es un factor clave tanto en el ámbito local como internacional. Hay que lograr llevar nuestros mejores atributos o bondades al cliente final. Las cuatros técnicas de comunicación son: publicidad, relaciones públicas, promoción de ventas y ventas personales. En función del producto o servicio de cada empresa, y siempre acorde al presupuesto que se desea invertir, estableceremos las acciones más apropiadas a llevar a cabo.

Precios

Se deberán realizar cotizaciones teniendo en cuenta los costes de transportes y logística para hacer una adecuada valoración de los márgenes que quedarán como resultado de todo el proceso. Por lo que habrá que tener muy en cuenta los Incoterms empleados. La gestión de cobro es otro aspecto fundamental que se deberá valorar, tanto por seguridad para la empresa como por los gastos que se deberán asumir en función de la metodología establecida. Además de esto, una correcta política de cobertura de riesgos es esencial ante cualquier operación internacional.

Plan financiero

Una vez realizados todos los pasos anteriores, llevaremos acabo una estimación de los objetivos que se va a marcar la empresa y con ello se estudiará las inversiones necesarias para afrontarlos con total garantía.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR